martes, 9 de octubre de 2007

Según la moraleja

Buenas, buenas! ¿Cómo arrancaron la semana? ¿Con frío? Abríguense porque para mañana anunciaron 5 grados!!!
Acá les dejo un texto, que a shikorim le resultará conocido y habla de las huellas que dejamos en los demás. ¿Te diste cuenta de que sin querer podes provocar cosas en el otro realmente muy significativas? "Puede ser que para el mundo vos no seas nadie, pero para alguien, vos sos el mundo".
Buena semana y hasta el finde!
Chur.

LA HUELLA

Por donde pases deja una huella.
Para eso no es necesario que pises fuerte, que te hagas notar con autoritarismo, que trates de llamar la atención con bombos y platillos.
No… No son tus voces de mando, ni tu aspereza, ni tu rigor, ni la ropa que llevas puesta… será… eso que hay dentro tuyo y no se puede explicar con palabras, eso que nos hace poner la piel de gallina, o lagrimear, o dudar, o temblar de miedo, entristecerse; será… eso de ti que has dado con tu corazón:
La palabra al que lo necesita;
Aliento al que está bajoneado;
El consejo que todos pedían;
La generosidad para comprender algunas cosas;
Las personas que hacen las cosas solo para que se las agradezcan no dejan huellas, ni corazones encendidos. Para dejar una huella hay que quedarse un poco en lo que se hace…
Para dejar una huella… chiquitita… no importa el tamaño, sino el signo que indique que pasaste por allí.
Eso que tenés dentro, dejalo salir, los sentimientos que nunca te abandonan, se guardan muy adentro y hay que sacarlos y demostrarlos. Eso que no se puede explicar pero deja huellas.

1 comentario:

Juventud Dor Jadash dijo...

Me hace acordar a la vez que pusimos nuestra huella en el libro gordo de Dorja (el dorado). Todo el tzevet lo hizo creo, habrá sido el año pasado o este, no recuerdo, pero creo que en el 2006.

Un saludo,